lunes, 12 de marzo de 2012

Cuando un lugar es más que un lugar

Cuando un lugar son recuerdos, ES una persona, son vidas, experiencias, es un símbolo, es barrio, son planes, es potencialidad...

Estos son los famosos "mi lugar en el mundo", donde podemos ser nosotros plenamente, un lugar de descanso, de reflexión, un lugar que con sólo pensar en él ya nos tranquiliza y reconforta. Es un lugar donde se puede estar a gusto y desde donde siempre se tienen las mejores ideas. Donde soñamos con grandes planes que en general ni hacemos porque claro, realizar cosas desde ese lugar es hasta muy fácil... si ya sabemos que no pueden salir mal.

Cuando todo esto pasa es cuando perder ese lugar no es simplemente perder el espacio físico sino que implica muchísimas cosas más. Entonces te das cuenta que en el mundo de hoy sólo hay lugar para este tipo de sentimientos si se tiene dinero para respaldarlos, porque si no no son nada y no se tienen en cuenta. Son atropellados bajo la excusa que son inútiles, no son prácticos, o peor, porque son solamente sentimientos...

Perder un lugar así es desengaño, es impotencia, es darte cuenta (una vez más) que las cosas no siempre son como a uno le gustaría. Pero incluso en estos momentos de pérdida estos lugares se esfuerzan por darnos una enseñanza más, nos hacen tomar conciencia de que todo en esta vida es finito y que hay que disfrutarlo mientras se pueda.

Por si no se notó, yo estoy a punto de perder uno de esos "lugares en el mundo". Esto me genera muchísima bronca, impotencia y tristeza; pero también generó esta reflexión.

Y vaya si mi lugarcito no se generó un lindo homenaje, porque ahora cada vez que lea esto me voy a acordar de todo lo que viví ahí. Así de especiales son estos sitios, que hasta se dan el lujo de homenajearse e incrustarse en la memoria... como si esto último hiciera falta.

1 comentario:

  1. Mi lugar en el mundo, como para mostrarte otra vista, es un lugar al que llegué casi por casualidad, y al que, desde entonces, prometí regresar... y si es posible, vivir allí y morir allí.
    No es un lugar que me traiga muchos recuerdos, es un lugar que me traslada a posibles futuros...
    Es un lugar abierto a la imaginación de lo que allí podría pasar... y la certeza de que en ese sitio me esperan cosas buenas.
    Quizás te estés despidiendo de un lugar en el mundo del tipo que vos muy bien explicás y quizás pronto encuentres otros que signifiquen nada más y nada menos que... una posibilidad... ¿de qué?... dependerá de vos.
    Me gustó compartir lo que tenías para decir. Gracias.
    Pasajera

    ResponderEliminar

Vamos, vamos, ¡anímese a escribir algo!